Geográficamente, Renania es una región del oeste de Alemania. Pero para los habitantes de la zona norte Renania es una panadería alemana de culto. Un lugar donde al cruzar la antigua puerta de madera te invade una mezcla de aromas de varios panes. Es una empresa acquainted, que ya lleva tres generaciones al frente, amasando y elaborar entre 600 y 700 kilos de pan al día, utilizando 60 kilos de masa madre y muchísimos sacos de harina.
“Al principio, la cola de clientes y curiosos period de 60 metros”, cuenta Gerardo Vom Brocke, responsable de la finca acquainted junto con su hermano Roberto. La fila se renueva cuando los fanáticos de los bretzels (que algunos confunden con pretzels) acuden los viernes y sábados. buscar su barriga con una forma tan explicit.
Los clientes provienen de todos los puntos cardinales, tanto de la Ciudad como de la provincia.. Los vecinos de la zona se distinguen por sus compras pequeñas y diarias o semanales -clientes a los que los empleados saludan amablemente con su nombre- de los que viajan desde otros barrios y se abastecen de más para poder disfrutar todo el mes de panes, facturas, budines y especialidades alemanas.
La historia de Rhineland, la panadería alemana de Florida
Fue en 1930 cuando Daniel Vom Brocke llegó a la Argentina, dejando atrás su Alemania natal. En busca de una mejor calidad de vida pero sin renunciar a su oficio y su pasión: hacer pan. Fue así como, un año después de su llegada, abrió su primera panadería llamada Westfalia. Pasaron los años y en los años 60 nació Renania (Güemes 2622, Florida). ofreciendo siempre productos elaborados con fórmulas y técnicas alemanas.
Desde aquel día las puertas de la panadería alemana siguen abiertas. El native de 550 metros cuadrados también es el centro de producción de Renania en Acasusso (Eduardo Costa 1200) y de bollos (juego de palabras con el apellido ya que “von brötchen” en alemán significa “de la panza”) en asociación con Jonathan Von Brocke (Av. Juan Segundo Fernández 256, San Isidro).
Daniel trajo a Argentina la receta del tradicional pan negro, llamado Vollkorn, un pan muy consumido en la comunidad alemana y poco conocido por estos lares. Gerardo y Roberto crecieron viendo el esfuerzo y el placer que implica ser panaderos. “Mi mamá nos retaba cuando nos veía blancos, después de saltar entre los sacos de harina”, recuerda Gerardo con una sonrisa mientras no descuida la enorme producción de vollkorn que elaboran casi a diario.
Detrás de escena se puede ver un antiguo horno de piedra de mampostería donde horneaba el abuelo, que aunque ya no lo usan, todavía funciona. A pesar de Nunca cambiarán las recetas. Han invertido en la mejor tecnología y ahora trabajan con dos grandes hornos de última generación.Alemanes, por supuesto.
La plantilla completa de Rhineland Florida es de doce personas, contando a los hermanos Von Brocke que han aprendido el oficio desde muy pequeños y continúan con orgullo el legado. Los primeros en llegar encienden los hornos a medianoche y terminan su turno sobre las 6 de la mañana para que los clientes madrugadores puedan conseguir su pan calentito en la madrugada. “Esto nunca se detiene. Excepto los lunes, que son sagrados”, afirma Gerardo.
“El plan de advertising and marketing que nos dejó mi papá sigue siendo muy efectivo. Hacemos todo diferente a todos los panaderos aquí.. ¡Funcionó durante mucho tiempo y funciona!” cube Gerardo. Y comenta que han vendido sus panes a supermercados e incluso Suministraron los aviones de aerolíneas como Lufthansa, KLM, Iberia y Aerolíneas Argentinas… “De aquí para el mundo entero”, cube gesticulando y abriendo los brazos.
Pero como el ritmo de trabajo y la exigencia los superó, decidieron continuar sólo con las instalaciones para poder brindar siempre la mejor calidad.
El líder Narda Lepes declara su amor por Renania. La conoció a través de un amigo que vive en la zona y cada vez que recibía la visita de su cocinera, para entretenerla, le compraba delicias alemanas.
“Lo que más me gusta de Renania es que es una panadería tradicional alemana con dátiles.. Hacen productos especiales para Navidad, para Semana Santa…”, cube y añade que Sus favoritos son los florentinos y un pan de jengibre bañado en chocolate..
Qué comprar en Renania
La oferta es variada y tentadora. Ofrecen panes largos de aproximadamente medio kilo, de varios sabores. Lo más destacado es el vollkorn ($1,590), una pieza integral de centeno puro, con un sabor ligeramente ácido. “Porque tiene masa madre tipo alemana. Tienen una base de fermento ácido de centeno -como todos los panes alemanes- y eso lo hace muy digerible”, explica Gerardo. Se vende en un paquete cuadrado, rebanado, por 350 gramos.
Otro de los productos estrella son los pretzels ($400), con B”. Gerardo explica que Los hacen con receta bávara, bien tradicional de la tierra de sus antepasados. “Se amasan, se montan y se dejan fermentar un rato. Luego se bañan para maltearlos (con agua y bicarbonato de sodio en un porcentaje muy pequeño). Eso es lo que le da el shade, la cáscara y la malta”, cube el maestro panadero que los remata con granos de sal y los lleva al horno.
A diferencia de los pretzels americanos, que son parecidos a un snack, de la misma forma, pero muy pequeños y crujientes, Los pretzels son panes del tamaño de la mano de un adulto, crujientes y salados por fuera con un corazón de pan. Se venden individualmente en el formato clásico, en barra o en bollo.. Dato: hacen aproximadamente 600 por día, los viernes y sábados, por lo que se les acaba por la tarde. Pero, la buena noticia es que se pueden reservar.
Las paredes están revestidas de panes como el pan de tres o cinco granos ($2,2250) y baguettes rústicas, francesas o integrales (desde $480). La trenza con semillas de amapola ($1.400) es muy tentadora y junto a ella están el famoso zepelín ($1.180) y pan tirolés ($1.350).
La masa está hecha con la receta de la tía Lili., quien period el experto en dulces de la familia. El galletas especiadas spekulatius ($3,300) Se comen en época navideña, pero el público las eat tanto que pasaron a formar parte de las galletas fijas. En diciembre hornean stollen, el pan dulce alemán.
Dentro del repertorio dulce se encuentra lebkuchen -galletas de miel muy aromáticas-variedades de pudín (desde $ 1,580), cuadritos dulces, croissants y billetes vieneses ($ 3,800 la docena, $ 350 cada uno).
Visitar Renania es viajar con el paladar al viejo continente y saborear recetas tradicionales, hechas con amor.
Renania. Abierto de martes a sábado, de 8:30 a 13:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas. Gral. M. Miguel de Güemes 2622, Florida, Provincia de Buenos Aires. Instagram: @renania_panaderia